La diputada nacional Gladys Medina (Frente de Todos), de Tucumán, presentó un proyecto de ley de reforma del Código Penal (CP), con el fin de fijar una pena de prisión efectiva de entre dos y 12 años, dependiendo la gravedad de los daños, para los conductores que causen muerte o lesiones graves por manejar en estado de ebriedad o por hacer maniobras imprudentes.
La iniciativa de la legisladora tucumana precisa: “Será reprimido con prisión de dos (2) años de seis (6) años e inhabilitación especial, en su caso, por cinco (5) a diez (10) años, el que por imprudencia, negligencia, impericia en su arte o profesión o inobservancia de los reglamentos o de los deberes de su cargo, causare a otro la muerte”.
En tanto, agrega: “Será reprimido con prisión de tres (3) a ocho (8) años, más inhabilitación especial de quince (15) a veinte (20) años si fueren más de una las víctimas fatales, o si el hecho hubiese sido ocasionado por la conducción imprudente, negligente, inexperta o antirreglamentaria de un vehículo automotor”
Además, prevé que “será reprimido con prisión de cuatro (4) a doce (12) años con más inhabilitación especial permanente, si al momento del hecho el conductor se encontrare bajo los efectos del consumo de estupefacientes y/o ingesta de bebidas alcohólicas superior al límite máximo permitido por la legislación vigente, y/o si el autor se diere a la fuga con el propósito de eludir la acción de la justicia, y/o si el conductor participare en una prueba de velocidad o destreza con un automotor, sin la autorización pertinente”.