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Lo señalaron dos informes semestrales de Fedecom, que denunciaron también el crecimiento de la venta ilegal. En algunas localidades, uno de cada cuatro negocios bajó sus persianas
La caída acumulada en las ventas minoristas, sumada a las restricciones impuestas para controlar la propagación de la pandemia de coronavirus, más la presión impositiva y el insuficiente financiamiento y ayuda de los Estados a los sectores más críticos, determinaron que 7% del total de los locales comerciales registrados en Córdoba cerrara definitivamente sus puertas en el primer semestre del año.
