En Bruselas, Bélgica, un tribunal de primera instancia le dio al gobierno un plazo de 30 días para suspender las restricciones impuestas a raíz de la pandemia, al considerar que ellas hasta ahora carecen de base legal.
El decisorio fue dictado en el marco del caso que generó la Liga de los Derechos Humanos (LDH), que argumenta que las mandas salieron adelante con órdenes ministeriales que escaparon al control parlamentario.
Por ello, reclamó que haya en el Legislativo debate y votación de cada norma.
El decisorio fue dictado en el marco del caso que generó la Liga de los Derechos Humanos (LDH), que argumenta que las mandas salieron adelante con órdenes ministeriales que escaparon al control parlamentario.
La ministra de Interior, Annelies Verlinden, anunció en un comunicado que recurrirá el decisorio y precisó que las medidas actuales “siguen siendo aplicables”.
“El Consejo de Estado, en Asamblea General, que es la jurisdicción administrativa más alta de nuestro país, así como varios tribunales penales y civiles, incluido un tribunal de apelación, han dictaminado en el pasado que la base legal actual es suficiente efectivamente como una base legal para el decreto ministerial”, agregó la funcionaria.
Por su parte, la abogada de la LDH, Audrey Lackner, consideró que si bien pueden restringirse derechos y libertades, “dada la importancia de lo que está en juego y la necesidad de proteger los derechos a la vida y la salud de las personas”, las leyes deben ser justas y proporcionadas.