Los fiscales Diego Velasco y Guillermina García Padín reclamaron que José María Núñez Carmona, socio y amigo del ex vicepresidente Amado Boudou, vuelva a la cárcel para cumplir su condena por el caso Ciccone, que quedó firme en 2020.
Los agentes reclamaron que se revoque la prisión domiciliaria que tiene desde agosto porque sus problemas de salud pueden ser tratados en una una unidad penitenciaria.
Ahora, el juez Daniel Obligado debe resolver la situación de Núñez Carmona.
Boudou
El magistrado ya revocó el beneficio del que goza Boudou, pero su traslado a un centro de detención quedó supeditado a que se pronuncie la Cámara Federal de Casación Penal y, eventualmente, la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
En agosto de 2018, el Tribunal Oral Federal 4 condenó a Boudou a cinco años y 10 meses de prisión y a Núñez Carmona a cinco años y seis meses.
Ambos quedaron detenidos pero durante los primeros meses de la pandemia se les otorgó la domiciliaria.
Cabe recordar que Obligado, vocal del mismo tribunal que le negó el beneficio a Boudou a fines de marzo alegando que no integra el colectivo propenso a contagiarse en la cárcel, cambió de opinión en abril y lo autorizó a trasladarse a su domicilio.
El Servicio Penitenciario Federal (SPF) no incluyó al ex funcionario en el listado de internos que integran el grupo de riesgo, pero Obligado, actuando como juez de Ejecución Penal, mandó al ex vice a su casa.
“El actual contexto mundial de emergencia sanitaria a causa del Covid-19 trastoca prácticamente todas las pautas de las relaciones interpersonales”, escribió el magistrado, quien 10 días antes, junto a sus pares, había argumentado que la pandemia no era motivo para disponer “salidas automáticas”.