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Históricamente, el alza generalizada de los precios pone en jaque el poder adquisitivo de las familias argentinas. Mes por mes, cómo fue la evolución desde que se dispuso el ASPO
Históricamente, el alza generalizada de los precios en el país pone en jaque el poder adquisitivo de las familias. Esta situación se ha profundizado aún más desde la llegada de la pandemia de coronavirus y la primera disposición de Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO).
De hecho, según la comparativa entre el último Índice de Precios al Consumidor (IPC nivel general) y el Índice de Salarios difundido este jueves -ambos informes publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec)– entre marzo y agosto pasado fueron muy pocos los períodos donde algún sector logró recomponer sus salarios por encima de la inflación.
En un cuadro elaborado por Comercio y Justicia sobre la base de los datos oficiales, se puede observar que solamente en marzo y abril el sector privado logró un incremento interanual acumulado de los ingresos de los trabajadores por encima de la variación del costo de vida, seguramente por impacto de las negociaciones paritarias y particulares de los profesionales.
Mientras el IPC subió en doce meses 48,40% en marzo y 45,60% para abril, el alza percibida promedio en los privados alcanzó 52,10% y 47,70% respectivamente. En tanto, durante el resto de los meses que se encuentran dentro del período de “cuarentena”, los resultados nunca jugaron a favor del sector trabajador.
Tampoco en este mismo período, tuvieron algún margen positivo los empleados públicos ni quienes no se encuentran registrados, ya que en esos casos los aumentos en los salarios acumulados en un año alcanzaron sólo a 41,70% y 39,70% los primeros, 33,20% y 32,50% los segundos.
Otro dato que se destaca en esta comparativa, es que en julio la diferencia entre la suba en el costo de vida y el alza de los ingresos fue hasta de trece puntos porcentuales.
Mientras en el séptimo mes del año la inflación llegó a 42% interanual, los salarios sólo evolucionaron 34% para los privados, 28,90% para los públicos y 34,80% para los no registrados.
Por otro lado, en las comparativas intermensuales se observan“tres casilleros positivos”. En marzo, mientras la inflación fue de 3,30%, el sector público – también por incidencia de las paritarias- avanzó 4,20% y el no registrado 3,50%, aunque la general se ubicó en 3%. Luego, en julio y agosto -considerando que fueron los meses donde la actividad más informal pudo retomar algo de su ritmo perdido- los no registrados lograron una recomposición de 4,20% y 3,70%, respectivamente, cuando el IPC se incrementó 1,90% y 2,70%.
Agosto
Mientras tanto, específicamente en el octavo mes del año, el Índice de Salarios registró un incremento de 2%, como resultado de un alza de 2,1% en los sueldos de los trabajadores privados, de 0,8% en los empleados públicos y de 3,7 % en los ingresos de los empleados no registrados, informó ayer el Indec.
De esta manera, en los primeros ocho meses del año el índice reflejó un alza acumulada del 18,6 % en promedio, tres décimas por debajo de la suba de 18,9% que registró la inflación en el mismo período.
ATP 7
El Gobierno explicó por qué se aplicará sólo para empresas en situación crítica
El Gobierno precisó que el Salario Complementario de octubre incluido en el Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP) se aplicará únicamente a empresas en situación crítica.
En ese sentido, el Ministerio de Desarrollo Productivo puntualizó en un informe presentado ante el Comité de Evaluación y Monitoreo del ATP que las empresas en ramas no críticas que estuvieron sin facturación o con la mínima, pasaron de 23%, en abril, a sólo ocho por ciento, en agosto.
En consecuencia, subrayó que “la economía argentina hoy presenta mayores niveles de actividad que en el segundo trimestre del año, momento en el que se produjo el impacto más severo de las medidas sanitarias aplicadas en el marco de la pandemia Covid-19, aunque todavía se encuentra por debajo de los niveles prepandemia”.
La cartera que conduce Matías Kulfas remarcó que “la recuperación ha sido profundamente heterogénea” y precisó que “mientras la industria y el comercio han tenido un repunte muy significativo, ramas como turismo, gastronomía, cultura, deportes o esparcimiento continúan muy afectadas”.
En consecuencia, sostuvo que “resulta relevante observar la distribución de las firmas en sectores críticos y no críticos según su variación de la facturación real y comparar cuál era la situación en abril y cuál en agosto”.
El reporte señaló además que “se fue incrementando el porcentaje de firmas con subas reales en la facturación o con caídas más moderadas y, por el contrario, cómo fue cayendo el porcentaje de firmas con caídas mayores al 50% real”.
Ayer, el Gobierno formalizó la séptima ronda del ATP con nuevas especificaciones, topes y montos respecto de los beneficios, a través de la decisión administrativa 1954/2020 publicada en el Boletín Oficial.
