Entre las nuevas disposiciones se destaca la baja en las retenciones a la soja y los beneficios para la exportación de bienes industriales. Además, se intenta desalentar aún más el ahorro y la inversión en dólares con nuevos instrumentos financieros, luego del endurecimiento del cepo que se determinó recientemente
Los ministros de Economía, Martín Guzmán; de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; y de Agricultura, Luis Basterra, anunciaron ayer un paquete de medidas económicas destinadas, principalmente, a frenar la tensión cambiaria, recuperar reservas y promover exportaciones.
Los funcionarios estuvieron acompañados por representantes de las cámaras empresariales, con la cuales se consensuó gran parte de los cinco grupos de disposiciones que se informaron en conferencia de prensa
“El mundo y Argentina están sufriendo una pandemia con fuertes efectos económicos”, dijo Guzmán al inicio de su alocución, aunque advirtió de que en un escenario extremadamente desfavorable, la administración nacional “viene observando cuestiones que muestran atisbos de recuperación”.
Entre los logros de la gestión económica durante los últimos meses, el ministro de Economía indicó que se encuentra la negociación de la deuda con los acreedores externos y el hecho de que se conocieron cifras positivas en la recaudación tributaria durante agosto y septiembre, en la comparación interanual.
Así, precisó el funcionario, se va configurando una “hoja de ruta para la recuperación económica”, en la cual enfatizó que juega un papel importante el proyecto de Presupuesto 2021 que se debate en el Congreso nacional.
En este marco, Guzmán procedió a explicar disposiciones que atienden fundamentalmente a la necesidad de dólares que existe en la estructura económica argentina en la actualidad. Para esto, se determinaron beneficios para el sector exportador (tanto industrial como agropecuario), un nuevo instrumento financiero en pesos cuyos rendimientos estarán atados al desempeño del dólar y un conjunto de impulsos para reactivar el mercado interno encabezado por la construcción.
Puntos centrales
En materia financiera, el ministro anunció el envío al Congreso de un proyecto de ley para desgravar el pago de Bienes Personales a los activos de inversiones financieras en pesos. Además, detalló que el próximo martes 6 el Palacio de Hacienda licitará un bono dollar linked.
En términos generales, para desalentar aún más las inversiones y el ahorro en dólares, la administración de Alberto Fernández busca “un sendero para el rumbo de la política monetaria y de armonización de la estructura de tasa de interés, y poder así definir una tasa de interés de referencia”, según precisó el ministro.
Con respecto a favorecer las colocaciones externas de la industria y el agro, el responsable de las políticas económicas nacionales mencionó una reducción de los derechos de exportación y mayores reintegros para los distintos sectores que conforman la cadena industrial.
Específicamente para el agro, anunció la creación del programa de compensación y estímulo de pequeños y medianos productores de granos de soja, con una inversión pública de hasta $11.550 millones y una reducción a 30% -del 33% vigente- de las retenciones a la soja, porcentaje que irá creciendo hasta ubicarse nuevamente en porcentual mencionado a principios de 2021.
En tanto, también se detalló una baja a 8% -del 12% actual- de la alícuota por derechos de exportación de metales, mediante la reglamentación de lo establecido en la Ley de Solidaridad sancionada en diciembre, según detalló.
Además, anticipó que prontamente se conocerán los detalles de un nuevo plan para el sector energético.
Vale señalar que el Gobierno espera que estas disposiciones favorezcan la venta externa de estos bienes y lograr que la liquidación de divisas tenga un mejor desempeño para recuperar el nivel de reservas y disponer del financiamiento necesario para los insumos que necesita el país para producir.
Mientras, también se enviarán al parlamento dos proyectos de ley para impulsar la construcción de viviendas y mejorar la cobertura del sistema de crédito hipotecario, mediante la creación de un fondo fiduciario de cobertura y promoción, para darle sustentabilidad al sector. Las iniciativas prevén la exención de Bienes Personales, por tres años, a los activos financieros que se apliquen a nuevas construcciones. En estos casos, también se diferirá el pago de los impuestos a las Ganancias y a la Transferencia de Inmuebles.
POLÍTICA MONETARIA
El BCRA asegura que el objetivo es “armonizar progresivamente las tasas de referencia”
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) también dispuso ayer distintas medidas tendientes a asegurar liquidez en el mercado y contribuir a eliminar las tensiones cambiarias.
En un comunicado, el BCRA anunció que “redoblará sus esfuerzos en pos del desarrollo de instrumentos de ahorro e inversión que permitan a los argentinos obtener rendimientos positivos no sólo respecto de la evolución de la inflación sino también en relación con la evolución del tipo de cambio. En este sentido, se procurará armonizar progresivamente las tasas de referencia de los instrumentos de política monetaria, minimizando el impacto sobre el costo de esterilización”.
La autoridad monetaria también señaló que, debido a “la mencionada necesidad de responder a las demandas de la pandemia, ha generado un incremento importante de la liquidez, monitorea atentamente la evolución de los agregados monetarios y actuará a través de las herramientas disponibles”
Además, “en el marco de los favorables resultados obtenidos en materia de normalización de la deuda pública, el BCRA utilizará su capacidad de intervención a través de operaciones de mercado abierto, a los efectos de auspiciar una mayor liquidez, profundidad y transparencia de los mercados de deuda soberana, en vistas de apuntalar el comienzo de una nueva etapa en la que el mercado de capitales local asuma una importancia creciente en la estrategia de financiamiento del sector público”, indicó el comunicado
La autoridad monetaria, en tanto, aseveró que “la irrupción de una pandemia sin precedentes y de duración todavía incierta, obligó a replantear las prioridades de política”. En ese contexto, la asistencia financiera al Tesoro y el impulso al crédito “se transformaron en piezas fundamentales dentro de una estrategia sanitaria y económica de emergencia que se propuso evitar que la crisis dejará tras de sí, secuelas permanentes sobre una economía ya fuertemente golpeada”.
Más adelante, el comunicado precisó que “los principales indicadores de actividad señalan una concentración de los efectos de la pandemia en el segundo trimestre, mientras que se observa una recuperación gradual y heterogénea de la actividad en el tercer trimestre del año”.
En cuanto al tipo de cambio, el BCRA sostuvo que “se encuentra en un nivel competitivo. El tipo de cambio real multilateral se ubica por encima de su promedio histórico, al tiempo que la balanza comercial acumula un importante superávit, ratificado también por el resultado positivo de la cuenta corriente del balance de pagos”.
En este sentido, la entidad que conduce Miguel Ángel Pesce enfatizó que “se reafirma la estrategia de sostenimiento de la estabilidad del tipo de cambio real, que se considera en línea con el objetivo de acumulación de reservas internacionales”.
“En el marco de la estrategia de flotación administrada, el ritmo de depreciación diario se adecuará en forma gradual a las necesidades de la coyuntura, de modo de evitar efectos no deseados sobre la competitividad, los precios internos, la evolución de los activos y pasivos y la distribución del ingreso”, precisó el texto.
Las autoridades señalaron, además, que “en un contexto signado por la escasez, las regulaciones sobre el mercado de divisas buscan evitar desequilibrios temporales que pudieran afectar la posición de reservas internacionales”, y que éstas “son un instrumento necesario para la coordinación de las decisiones individuales mientras se avanza en la mejora de la situación fiscal, externa y monetaria”.
Así, “se trabajará activamente en esta coordinación durante la transición para evitar los impactos negativos sobre la actividad productiva” y se buscará “en el mediano plazo regulaciones macroprudenciales compatibles con la dinamización de los flujos de capitales orientados a la economía real”.
Paralelamente, “para morigerar el impacto económico de la pandemia, el BCRA puso en marcha un conjunto de instrumentos de crédito, cuyos resultados han permitido un inédito crecimiento del financiamiento a pequeñas y medianas empresas.”
“La normalización del nivel de actividad que comienza a evidenciarse en algunas regiones y sectores, permitirá paulatinamente reducir y focalizar los esfuerzos de asistencia crediticia a tasas reales negativas, adaptándose a las necesidades de la nueva etapa”, se indicó.