Entre el 1 de enero y el 31 de julio de 2020 se registró un total de 168 femicidios, lo que implica 15 por ciento más casos respecto al mismo período del año pasado, cuando se cometieron 155.
El dato surge de un relevamiento del Observatorio de Femicidios de la Defensoría del Pueblo de la Nación, que le atribuyó la suba a la dificultades que atravesaron las víctimas durante la cuarentena por el coronavirus.
“El aislamiento social y preventivo contra el Covid-19 trajo aparejada la prohibición de la libertad o resguardo de la convivencia de la víctima con su agresor, y con ella, la dificultad de protegerse, independientemente de los diferentes dispositivos de comunicación que se implementaron”, indica el informe.
Entre otros detalles, precisa que del total de casos, 13 por ciento fueron vinculados -es decir, aquellos en los que el propósito del agresor es provocar sufrimiento a la víctima, agravante incluido en el inciso 12 del artículo 80 del Código Penal-, en los que murieron seis mujeres y siete varones.
Además, señaló que durante la etapa estudiada fueron asesinadas dos mujeres trans y que se produjeron dos “suicidios feminicidas”, categoría con la que se denominan los hechos en los que “las mujeres se quitan la vida como consecuencia de los abusos sistemáticos perpetrados por los hombres”.