La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió hoy de que “la fatiga ante la pandemia” de coronavirus está poniendo en riesgo la lucha contra ella, e instó a la población en todo el planeta a cumplir con las indicaciones y seguir con las medidas de precaución.
“La fatiga por las restricciones amenaza los valiosos triunfos que hemos obtenido contra el virus. La desconfianza de las autoridades, las teorías de la conspiración y alimentar movimientos contrarios al distanciamiento social y físico” ponen en peligro a nuestras sociedades en un momento clave, advirtió el director regional de la OMS para Europa, Hans Kluge.
Por su parte, la especialista en comportamiento social de la OMS, Katrine Habersaat, explicó que el cansancio de las sociedades ante las restricciones que impone la pandemia “se está expresando de formas distintas en diferentes países”.
Señaló que se manifiesta en “la salud mental, afectada por el aislamiento, la imposibilidad de tener el apoyo social que se tiene normalmente, con la situación económica y la necesidad de llevar pan a la mesa” o con factores culturales o sociales.
Kluge advirtió de que “el comportamiento que tengamos hoy, cuando empiezan a levantarse las restricciones”, determinará el curso de la pandemia y “qué camino seguimos: uno que nos lleve a la nueva normalidad o uno que nos lleve de vuelta a las restricciones de movimiento y de interacciones sociales”.
Por ello, instó a “seguir las recomendaciones de las autoridades nacionales, limitar las interacciones sociales, lavarse las manos, mantener distancia física y reducir riesgos para los más vulnerables”, según recogió la agencia de noticias EFE.
En Europa hay ralentización general de la pandemia, aunque en los países del este del continente los casos positivos todavía están en aumento.
Dentro de la región, Rusia, España y el Reino Unido siguen figurando entre los diez países del mundo que reportan un mayor número de casos diarios.
Europa ha registrado 1,78 millones de casos, de los cuales 160.000 han muerto, cifras que representan 43% de los casos y 56% de las muertes globales.
“No hay lugar para la complacencia”, advirtió Kluge en un pedido a mantenerse vigilantes justo cuando muchos países comienzan a levantar las restricciones.
Recordó que “en la última semana han emergido grupos (de infectados) en sitios como Wuhan (China) y Corea del Sur, donde el virus parecía haber desaparecido, un recordatorio de que la amenaza de que resurja el virus nunca está lejos”.
“Hasta que una vacuna o un tratamiento estén disponibles para todos, limitar el virus requiere un acuerdo entre la gente y los políticos, un contrato social que va más allá de los países o los líderes” políticos, agregó.
También instó a los gobiernos a “escuchar” a sus poblaciones, ganarse su confianza y hacer una comunicación efectiva de lo que sucede.
Respecto del retorno del turismo y la apertura de fronteras de cara al verano, los expertos de la OMS se limitaron a señalar que dependerá del análisis de riesgos que haga cada país.
Los datos, señalan, están ahora empezando a llegar, pero todavía se desconocen muchas cuestiones de la enfermedad.
Podría ocurrir que el Sars-CoV-2 (como se denomina científicamente el nuevo coronavirus) “se convierta en un virus endémico, como otros virus estacionales del grupo de los coronavirus, y otra opción es que pueda mutar”, y hay que vigilar de cerca “cómo se comporta el virus, cómo se comporta la población humana y las intervenciones sobre las que podemos influir”, alertó.
“No es momento de celebraciones sino de preparativos”, afirmó el especialista.