La deuda provincial se ubicó al 30 de abril pasado en 121.025,07 millones de pesos, 2.300 millones de pesos por encima del mes anterior y más del doble que la registrada en el mismo mes del año pasado.
Los datos incluidos en la web del Gobierno provincial muestran una vez más el impacto del dólar respecto al pasivo.
De hecho, de la deuda total, apenas 6.229,5 millones de pesos es endeudamiento en moneda nacional. El resto es o en dólares o en euros, traducida a pesos al tipo de cambio registrado al 30 de abril pasado que, según la Provincia, era de 44,15 pesos. En tanto, el euro cotizaba a 49,59 pesos por unidad.
Respecto a la composición del pasivo, no hubo mayores novedades con relación al mes pasado cuando se reflejaron por primera vez los créditos con el BBVA y el Deutsche Bank para financiar escuelas y hospitales. Aún no aparecen los fondos árabes que solventarán los acueductos en el interior y cuya licitación se demoró precisamente porque aún no se concluyeron los trámites para lograr esos desembolsos.
Como fuere, el tenor del pasivo es un tema de preocupación no ya por los vencimientos de capital por delante sino ahora por los altos intereses de deuda que se están pagando y que ya más que duplican a los erogados el año pasado (ver nota principal).
En cuanto a los vencimientos de capital, recién en 2021 deberá afrontarse uno de peso que supera los 45 mil millones de pesos con la cotización del dólar a la fecha.
Desde el Gobierno provincial descuentan que el panorama financiero se aclarará ya desde el año que viene para poder avanzar en una refinanciación de esos bonos o emisión de un nuevo título para cancelar esa deuda, tal como ocurrió oportunamente con los Boncor 2017.
De mantenerse este escenario de inestabilidad, la situación complicaría sobremanera las cuentas públicas.