ESCUCHARSe busca instalar la oralidad, simplificar las estructuras procesales y agilizar los tiempos de la Justicia. La iniciativa se encuentra en sintonía con medidas que están aplicando paulatinamente las provincias
La Comisión Redactora del anteproyecto de Código Procesal Civil y Comercial –integrada por jueces, abogados y académicos- analizó los últimos detalles de la iniciativa que, en los próximos días, se le presentará al ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Germán Garavano. Cabe recordar que se trata de un trabajo conjunto que se realizó con la sociedad civil a través de la plataforma Justicia 2020 y que contó con aportes de actores de todo el sistema de justicia.
El nuevo texto normativo busca instalar la oralidad efectiva en los procesos de conocimiento, simplificar estructuras procesales al distinguir las que requieren inmediación de las que admiten procesos escriturarios y abordar la problemática de la oficina judicial como soporte de la actividad jurisdiccional. Además, instalar el uso de tecnología en la justicia y procurar la finalización del proceso en el menor tiempo posible.
“Este nuevo Código tiene que ver con el cambio de mirada y la adecuación a los tiempos que corren de una legislación mucho más moderna”, indicó Rubén Calcaterra, uno de los miembros de la Comisión de Expertos que elaboró el anteproyecto.
“El Código Procesal Civil y Comercial que rige hoy es del siglo pasado. Nosotros estamos haciendo una modificación que es de base. Se pasa de un proceso esencialmente escritural a un proceso mixto entre lo escritural y lo oral que es fundamental para acortar los plazos de los juicios”, dijo el académico.
“Por eso, la mayor ventaja va a ser la celeridad, la inmediatez que el juez va a tener con las partes: va a estar con ellas y eso asegura una justicia mucho más cercana con la comunidad y, además, una justicia mucho más segura, rápida y confiable”, aseguró.
Para el funcionario, el nuevo código procesal va a permitir que los juicios sencillos se tramiten más velozmente y que los juicios más complejos se tramiten oralmente. “Es un modo mucho más transparente que el mero trámite escrito”, insistió.
La justicia del ciudadano
En la audiencia preliminar se va trabajar junto al juez y las partes sobre los hechos y las pruebas, pero siempre propendiendo a una conciliación. Luego se produce toda la prueba que no sea oral y en la audiencia de vista de causa, oralmente se recibe la declaración de testigos, peritos y partes.
“Es la Justicia del ciudadano que no es víctima de un delito ni es un delincuente”, agregó Chayer.
El trabajo de la comisión tuvo una serie de objetivos en su desarrollo que marcan la naturaleza de la reforma que se pretende. Desde la redefinición del rol del juez con la incorporación de las audiencias donde su participación es ineludible hasta la videograbación de estas. A ello se agrega la utilización de las nuevas tecnologías de la mano del uso del expediente digital, eliminando el soporte escrito para las actas de audiencia y remplazarlo por medios audiovisual.
También la reforma pretende la reducción de costos y de la demora de los procesos y la simplificación de estructuras y actos procesales. además de la publicidad y transparencia de la oficina judicial. Según se informó oficialmente, esta dependencia funcionará con criterios de “agilidad, eficacia, eficiencia, racionalización del trabajo, responsabilidad por la gestión, coordinación y cooperación”.
En Córdoba
Desde febrero, Córdoba introdujo la oralidad en 15 juzgados de la ciudad de Córdoba del fuero Civil y Comercial; y la ciudad de Río Cuarto. Por el momento, el procedimiento se aplica a las demandas de daños y perjuicios por montos inferiores a $160 mil. Asimismo, se puede llevar adelante en aquellos juicios en los que las partes -de común acuerdo- o a propuesta del juez, soliciten su adhesión.
