La eliminación del fondo sojero implica unos $3.000 millones menos hasta fines de 2019, cifra que se neutraliza en parte con ingresos extras por unos $1.500 millones por baja de los reintegros a exportadores. En tanto, la suspensión de la reducción en las retenciones a derivados de la soja no tiene impacto directo aunque sí en la dinámica económica. Críticas de diferentes sectores
El Gobierno nacional anunció ayer un paquete de medidas fiscales que involucran ingresos extras por $65 mil millones desde ahora y hasta 2019 inclusive que, para el caso de la Provincia de Córdoba, implica resignar recursos por unos $1.500 millones.
La decisión fue informada por la mañana por el Ministerio de Hacienda y Finanzas como parte de las medidas para reducir de manera gradual el déficit fiscal primario, uno de los los compromisos asumidos ante el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En rigor, las medidas apuntan a reducir envíos a las provincias y retocar impuestos y -por ahora- no tienen relación con ajustes en el gasto.
Así, el anuncio incluye tres frentes: se reducen 66% los reintegros a las exportaciones; se elimina el denominado Fondo Federal Solidario (FFS, fondo sojero) y, finalmente, se suspende por seis meses la baja gradual de las retenciones a los aceites y harinas de soja.
El ajuste implica un ahorro de más de $65 mil millones en los próximos 17 meses, esto es en lo que resta del año y en 2019.
La decisión, no por posible y en cierta medida esperada, dejó de generar sorpresa. Concretamente, la referencia es a la eliminación del denominado fondo sojero, que coparticipa a las provincias parte de las retenciones a la soja. Esa alternativa formaba parte del paquete de medidas en análisis entre el Gobierno nacional y las provincias de cara al ajuste de 2019.
En principio, esa medida se aguardaba para 2019, no para ahora.
“Era algo previsible”, admitió sin embargo a Comercio y Justicia el ministro de Finanzas, Osvaldo Giordano. “Es una de las medidas que había planteado el Gobierno nacional para la discusión del presupuesto del año 2019, en el cual ha pedido un plan de austeridad de unos $100 mil millones con impacto directo en las provincias. Dentro del menú de alternativas estaba eliminar el fondo sojero, es decir que de esos recursos se apropia la Nación”, señaló.
Giordano explicó que “dentro de las medidas, era la que menos resistencia generaba en las provincias, era previsible que iba a pasar”. El titular de Finanzas admitió que implica “un esfuerzo significativo” ya que con esta decisión se cubre “un cuarto” del ajuste que la Nación pidió, lo que incidirá en la obra pública tanto provincial como municipal.
“Para la Provincia son unos 2.000 millones que se dejan de recibir, de los cuales 30%, es decir unos $600 millones, impactan en los municipios”, resumió Giordano, quien destacó que, previendo esa situación, Córdoba había decidido “acelerar el acuerdo con los municipios procurado darles fuentes alternativas de financiamiento”, en referencia al reciente Acuerdo Federal.
En todo caso, Giordano advirtió de que, más que la eliminación de ese fondo, preocupa la situación económica en general y su impacto en corto y mediano plazos.
En rigor, para la Provincia de Córdoba, la eliminación de FFS implica unos $3 mil millones de pesos menos entre este año y el próximo.
Para el Gobierno nacional, ese ajuste implica un ahorro de $35 mil millones. Hasta julio inclusive, Nación había “goteado” por ese concepto $1.391,7 millones a Córdoba.
Del monto total que remite, 30% debe coparticiparse con los municipios. En el caso de la ciudad de Córdoba, serán unos $350 millones menos. El fondo sojero, creado en 2009, debía ser utilizado sólo para obra pública, según la normativa que lo generó.
La determinación de la Nación de eliminarlo fue sin embargo cuestionada en otros ámbitos.
Así, el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, destacó que si bien la medida “era una de las alternativas” en análisis, “siempre lo hablamos para 2019, nunca para este año”. Recordó que hay obras en su provincia que ya estaban calzadas con ingresos provenientes del fondo sojero.
El Gobierno nacional justificó la decisión en que las provincias fueron ganando participación en los ingresos totales luego de tocar un piso en años anteriores.
Más ingresos
Pero el recorte que implica la eliminación del fondo sojero se compensará en parte con otros ingresos.
Concretamente, la decisión del Gobierno nacional de reducir 66% el monto total pagado por reintegros a las exportaciones implicará un “goteo” extra para las provincias en concepto de coparticipación del impuesto al Valor Agregado (IVA). Por esa vía, la Nación supone un ahorro de unos $34 mil millones entre este año y el próximo.
Claro que parte de ese monto -concretamente la mitad- debe coparticiparse con las provincias por tratarse de IVA. De esta forma, sólo la mitad de esos recursos ingresará de manera neta a la Nación. El resto irá a los distritos federales.
En el caso de la Provincia de Córdoba, de los $17 mil millones recibirá unos $1.500 millones extra producto del porcentaje que le corresponde en la denominada coparticipación secundaria.
También los municipios tendrán parte de ese goteo, mediante la coparticipación que le gira la Provincia.
Así, en la suma y resta de recursos, Córdoba recibiría unos $1.500 millones menos en los próximos 17 meses.
Para tener una dimensión del volumen que implica ese monto, es hoy uno por ciento del presupuesto total de gastos pautado para este año.
“En otro contexto hubiese pasado, pero ahora, en un escenario de escacez, todo se siente el doble”, graficó una fuente acostumbrada a lidiar en el día a día con los ingresos y gastos.
Sobre esa medida, la Nación indicó que los reintegros a la exportación “justifican su existencia en la vigencia de impuestos indirectos que se acumulan durante el proceso de producción y que no tienen una devolución al exportarse”.
Y agregó: “La reforma tributaria y el pacto fiscal, que reducen los impuestos al cheque y a los Ingresos Brutos, generan el espacio para que dichos reintegros puedan ser reducidos”.
El ahorro fiscal de esa medida es de $5 mil millones en 2018 y $29 mil millones en 2019. No obstante, como la mitad irá a las provincias por coparticipación, el monto neto para Nación es de unos $17 mil millones.
En cuanto a los derechos de exportación de la soja, se mantiene la baja prevista en la alícuota de los granos pero se suspende por seis meses la baja establecida para aceites y harinas.
Los ingresos adicionales para la Nación por esta medida son de $1.500 millones en 2018 y $12.000 millones en 2019, estimó Hacienda.
Si bien esa decisión no impacta en la Provincia -en rigor, al elminarse el fondo sojero es irrelevante cualquier cambio en esos tributos-, sí lo hace de manera indirecta.
Es que uno de los principales productores de derivados de soja es Aceitera General Deheza. “Medidas de este tipo terminan golpeando la industria y a su zona de influencia”, consideró una fuente.