Según la información del Indec, el déficit no era tan bajo desde abril de 2017, cuando había llegado a 112 millones de dólares. El mes pasado, el resultado de la balanza comercial fue negativo en 382 millones de dólares. El comportamiento se debe a la reciente corrida cambiaria
Debido principalmelmente a la fuerte devaluación que sufrió el peso, en junio, el déficit de la balanza comercial fue el menor de los últimos 14 meses: alcanzó un rojo de 382 millones de dólares, de acuerdo con la información que difundió ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Así, las exportaciones alcanzaron 5.076 millones de dólares y las importaciones, 5.458 millones de dólares.
Según la información oficial, las exportaciones cayeron 1,4% respecto al mismo mes del año anterior (-74 millones de dólares), mientras que los precios subieron 9,8% y las cantidades exportadas bajaron 10,2%.
En tanto, el valor de las importaciones en junio cayó 7,5% respecto al registrado en igual mes del año anterior (442 millones de dólares menos), los precios subieron 4,7% y las cantidades importadas se contrajeron 11,7%.
Si bien el desequilibrio de junio fue bajo, el acumulado en los primeros seis meses ya casi duplica los 2.616 millones de dólares de igual período del año pasado, ubicándose muy cerca del proyectado en la ley de Presupuesto para todo el año, que es de 5.600 millones de dólares.
El Indec detalló que las exportaciones de productos primarios cayeron de manera interanual 25,7%; las de manufacturas de origen agropecuario (MOA), en tanto, aumentaron 3%; las de origen industrial (MOI) crecieron 10,4%; y las exportaciones de combustibles y energía aumentaron 96,2%.
En términos desestacionalizados, las exportaciones totales de junio aumentaron 0,9% respecto de mayo.
Por su parte, las importaciones de bienes de capital cayeron 16,9%; las de bienes intermedios aumentaron 4,1%; las de combustibles y lubricantes cayeron 6,2%; las de piezas y accesorios para bienes de capital se contrajeron 10,3%; las de bienes de consumo bajaron 8,8%, y las de vehículos automotores de pasajeros cayeron 15%.
En términos desestacionalizados, las importaciones de junio de 2018 se retrajeron 10,8% respecto de mayo.
Las mayores caídas de las importaciones, relativas a capítulos y partidas, correspondieron a vehículos automóviles, tractores, velocípedos y demás vehículos terrestres (45,5% de la caída total de importaciones); partes destinadas a motores, generadores, grupos electrógenos y convertidores rotativos; vehículos y material para vías férreas; productos farmacéuticos; combustibles minerales y de máquinas para el tratamiento o procesamiento de datos.
El único aumento de importaciones significativo correspondió a porotos de soja excluidos para siembra.