Opera en Argentina el sitio www.renegociable.com.ar, un catálogo de negocios en funcionamiento que sus dueños quieren vender.
“Vender bien un negocio no se remite sólo al mayor precio posible que puede obtener quien vende. Vender bien algo que está en funcionamiento supone dar con la persona correcta, alguien que va a poder continuar lo bueno hecho y mejorar lo malo que se pueda tener”, señala Juan Pablo Las Heras, uno de los socios, junto a Agustín Baca y Pablo Giordano.
La plataforma desembarcó hace dos meses en Córdoba con el objetivo de facilitar la compra y venta de negocios que están en funcionamiento.
El sitio ya tiene cien comercios cargados, en su mayoría de la provincia de Córdoba y de los rubros más diversos. Por el momento, tanto la carga como la consulta de los datos es gratuita y sólo se requiere registro de usuario.
La plataforma también trabaja con franquicias activas y ofrece una categoría especial de “busco socio”, donde el vendedor necesita aporte de capital pero sin desprenderse del negocio.
Los usuarios también cuentan con asesoramiento a la hora de poner precio al comercio. “Nos ha sorprendido la cantidad de consultas, es muy difícil ponerle un valor al activo cuando se es dueño”, añadió Las Heras.
Explicó que hay tres precios para los comercios: uno afectivo, donde pesa la subjetividad de quien inició el proyecto y depositó en él todos sus sueños; un valor de mercado, atado a la coyuntura económica y uno técnico, donde se hacen los análisis técnicos, que trabajan con la técnica de flujos descontados. “Lo bueno de saber cuál es el valor técnico es que da una referencia para no malvender el negocio. La propuesta de valor es ofrecer ese diagnóstico a las partes”, agregó Las Heras.
“El contexto de incertidumbre puede suponer en algunos rubros cierto parate, pero en este segmento aparece una cantera de oportunidades, porque los interesados que tienen dólares ven que ahora les rinde un poco más”, opinó Baca.
“Hay mucho prejuicio cuando se vende un comercio, enseguida se supone que es porque no funciona, pero en general las razones so otras: un ciclo de vida cumplido, cansancio, separaciones, mudanzas o las ganas de iniciar algo en otro rubro”, dijo Giordano.