Febrero y abril, en el inicio del tratamiento en comisiones de la Cámara de Diputados del debate de una norma que garantice el aborto legal, fueron los meses más activos en Twitter del ciberactivismo -que continúa hasta hoy- a favor de la legalización, espacio también disputado por quienes se oponen a la ley.
Es una de las conclusiones a las que llegó la investigadora Claudia Laudano, profesora del Instituto de Investigaciones en Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de La Plata, especializada en tecnologías digitales y feminismo.
“El activismo digital en Twitter marcó un récord el 19 de febrero 2018, por la potencia del hashtag #AbortoLegalYa, con 40.500 cuentas, que lo convirtió en primera tendencia en el país y segunda a nivel global”, señaló la profesional.
De acuerdo con su análisis, a partir de entonces la Campaña Nacional por el Aborto Legal Seguro y Gratuito (@CampAbortoLegal) “lideró las acciones públicas en línea y en la calle”.
Laudano destacó que el fenómeno no puede analizarse separado de un activismo intenso en el espacio público, con acciones en lugares variados.
“Sería inadecuado entonces separar el uso de una plataforma digital, como Twitter o Facebook, sin comprender el contexto de desarrollo histórico que la discusión pública por el aborto legal ha tenido en el país desde hace 30 años”, consideró.
Así, los “tuitazos” como acciones puntuales de convocatoria a utilizar la plataforma Twitter para la incidencia política, fueron en general acompañados por expresiones como los pañuelazos en muchas plazas del país. “Ambas acciones, tuitazos y pañuelazos, fueron creciendo en cantidad de modo simultáneo a lo largo de estos meses”, acotó.
Fue el inicio de las exposiciones informativas en Diputados el 10 de abril pasado, con movilizaciones en distintas ciudades del país, el que reinstaló el hashtag #AbortoLegalYa en el primer puesto de las tendencias nacionales, con 13.000 tuits, según destacó Laudano. De allí en más, la investigadora registró una cronología “incesante” de acciones, las que calificó como exitosas en redes, cada martes y jueves de las siguientes 14 sesiones informativas, cuando el reclamo por la legalización del aborto se convirtió indefectiblemente en tendencia de debate.
“Esa fecha, además del hash #AbortoLegalYa, sumó las consignas #QueAbortoLegalSeaLey, #LegalizacionAbortoYa, #AbortoNosotrasDecidimos, #AbortoDeudaDelaDemocracia #VivasYLibresAbortoLegal #VivasYLibresAbortoLegal #AbortoLegalJusticiaSocial #AbortoLegalEsSalud”, afirmó.
El más numeroso fue el 31 de mayo, último día de las sesiones informativas, con 8.965 cuentas y 17.730 tuits.
En lo que respecta a quienes se oponen a la ley, su activismo en Twitter sufrió cambios de estrategias. Al principio, cuentas registradas contrarias a la legalización intervenían en los hashtags propuestos por la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto, colocándole “No” adelante, de tal modo que se leyera No al #AbortoLegalYa.
“Esto se observa el 19 de febrero, uno de los tuitazos más voluminosos, donde desde posiciones contrarias a la legalización intervinieron, sin generar un resultado significativo, con un porcentaje bajo del volumen global de la conversación”, indicó.
Al mismo tiempo, ese día se generó un contrahashtag, #SiALaVida, que fue tendencia cerca de cuatro horas, frente a las nueve horas de #AbortoLegalYa en la misma jornada.
El 25 de marzo, Día del Niño por Nacer, junto a la marcha, quienes se oponen a la interrupción voluntaria del embarazo se posicionaron en Twitter con #SiALaVida, sobre el cual se conversó durante 8 horas desde 30.000 cuentas que generaron un volumen de 75.200 tuits”.
“Pero al analizar las principales cuentas que tuitean se registra que no son cuentas con muchos seguidores y que un número importante fue abierto ese día o apenas un mes antes”, opinó Laudano, quien destacó que se observa un intento de copar la plataforma a imagen y semejanza de lo que hace el activismo digital feminista; y que existe “un predominio de cuentas de varones entre las principales que tuitean”.
Asimismo, consideró que se ve una comunidad interpretativa en redes sociales que acompaña la “marea verde” que solicita la legalización del aborto.