Entre 2014 y 2017 aumentó a escala global la proporción de titulares de cuentas que envían o reciben pagos a través de medios digitales. En Argentina, alrededor de 20% de quienes tienen cuenta usan el teléfono móvil o Internet para operar
En el mundo se viene registrando un aumento significativo en el uso de teléfonos celulares y de Internet para realizar operaciones financieras. Entre 2014 y 2017, esto contribuyó a que aumente de 67% a 76% la proporción de titulares de cuentas que envían o reciben pagos a través de medios digitales. En los países en desarrollo, ese crecimiento fue de 57% a 70%.
Asimismo, 69% de los adultos en el mundo -3.800 millones de personas- hoy tiene cuenta en un banco o un proveedor de dinero móvil. Es un incremento con respecto a 62% y al escaso 51% registrados en 2014 y 2011, respectivamente.
De acuerdo con la base de datos Global Findex, entre 2014 y 2017 abrieron cuentas 515 millones de adultos; 1.200 millones lo han hecho desde 2011. “Mientras que en algunas economías el número de titulares de cuentas ha aumentado considerablemente, en otros lugares se han registrado progresos más lentos, a menudo limitados por grandes disparidades entre hombres y mujeres y entre ricos y pobres”, indica el informe del Banco Mundial.
Según el presidente del Grupo Banco Mundial, Jim Yong Kim, “es un paso crucial para reducir tanto la pobreza como la inequidad, y los nuevos datos sobre la propiedad de teléfonos celulares y el acceso a Internet muestran que existen oportunidades sin precedentes de usar la tecnología para lograr la inclusión financiera universal”.
La base de datos Global Findex, que analiza cómo144 países utilizan los servicios financieros, fue creada por el Banco Mundial con recursos de la Fundación Bill y Melinda Gates, y la colaboración de Gallup, Inc.
Cómo juega la tecnología móvil
A escala global, si bien hay 1.700 millones de adultos que aún no están bancarizados, dos tercios de ellos poseen un teléfono celular que podría ayudarlos a acceder a los servicios financieros. En el informe se concluye que mediante la tecnología digital se podrían aprovechar las operaciones que actualmente se realizan en efectivo para incorporar a más personas al sistema financiero. Otras oportunidades de incrementar la cantidad de titulares de cuentas y el uso de éstas a través de pagos digitales: más de 200 millones de adultos no bancarizados que trabajan en el sector privado sólo reciben pagos en efectivo, al igual que los más de 200 millones que realizan operaciones agrícolas.
El panorama en la región
En América Latina y el Caribe, el acceso amplio a la tecnología digital podría permitir el crecimiento acelerado del uso de tecnología financiera: 55% de los adultos tiene teléfono celular y acceso a Internet, es decir, 15 puntos porcentuales más que el promedio del mundo en desarrollo. Desde 2014, la proporción de adultos que realiza o recibe pagos digitales ha aumentado unos ocho puntos porcentuales o más en economías como las de Bolivia, Brasil, Colombia, Haití y Perú.
En Argentina, Brasil y Costa Rica, alrededor de 20% de los adultos que tienen cuenta usa el celular o Internet para operar a través de una cuenta. Digitalizando los pagos de sueldos en efectivo, las empresas podrían contribuir a que hasta 30 millones de adultos no bancarizados -de los cuales casi 90 % tiene teléfono celular- sean titulares de una cuenta.