La consultora Ecolatina señaló cuáles serán los principales condicionamientos que se impondrán para el país. Se espera que el costo financiero anual del crédito sea de alrededor de 4%, indicó la entidad especialista en análisis económicos
La decisión del Gobierno de acudir al financiamiento del Fondo Monetario Internacional (FMI) traerá condicionamientos en materia de política económica que “se posarán en mayor grado sobre el equilibrio de las cuentas externas”, de acuerdo con un análisis que fue difundido ayer por la consultora Ecolatina.
“Los condicionamientos en materia de política económica no serán inocuos sobre la trayectoria de las variables macroeconómicas, por lo cual vale la pena repasar las características del crédito”, indicó la entidad especialista en análisis económicos en un nuevo informe.
La consultora señaló: “El FMI exige no sólo un set de medidas económicas a partir del desembolso, sino también ‘acciones previas’, a las que define como medidas que el país receptor se compromete a adoptar antes de que el Consejo Ejecutivo apruebe el financiamiento o complete una revisión posterior”. Según Ecolatina, estas pautas generales de condicionalidad “fueron revisadas y reformuladas de manera extensiva por parte del FMI en 2002, apuntando a una mayor flexibilidad”.
“No obstante, su principal objetivo se mantiene inalterable: asegurar que el país en cuestión tenga capacidad de repago del crédito de modo que dichos recursos estén disponibles para otros países miembros”, agregó el informe.
“Entendido este metaobjetivo, el FMI ubica en un lugar central la necesidad de ‘restaurar o mantener la viabilidad de la balanza de pagos y la estabilidad macroeconómica’, según se desprende de la descripción de los stand by”, indicó la consultora. Esto supone “programas que establezcan criterios mensurables y observables en términos de niveles específicos de reservas Internacionales, así como límites específicos sobre los niveles de déficits y/o endeudamiento”, precisó.
“Dado que el Gobierno nacional ya cuenta con un programa de reducción progresiva en el frente fiscal (el cual incluso intensificó para 2018) y considerando también que el ‘gradualismo’ permanece en el centro de la lógica política adoptada, y la continuidad del proceso político está fuertemente atada a ella, estimamos que los condicionantes se posarán en mayor grado sobre el equilibrio de las cuentas externas”, concluyó.
Préstamo
En su comunicado, Ecolatina también repasó las características de los fondeos que puede ofrecer el FMI al país.
“El Gobierno apunta a obtener un respaldo del orden de los 30.000 millones de dólares (según trascendidos) equivalentes a 5% del PBI y más de la mitad de las reservas internacionales”, dijo la consultora y destacó que, “como aspecto positivo, el costo financiero, que rondaría el 4% anual, sería más acotado en comparación con el que se obtendría en el mercado de capitales (los bonos argentinos en dólares, en días previos al inicio de las turbulencias cambiarias, se ubicaban en más de 7%)”.
“Son líneas flexibles en términos de duración, ya que pueden cubrir desde 12 a 36 meses. En condiciones normales, se otorga hasta un 435% de la cuota del país en el organismo, lo que resulta en un monto máximo para Argentina de US$19.784 millones. Sin embargo, el FMI contempla la posibilidad de ampliar estos parámetros en circunstancias particulares, por lo cual los montos que han trascendido son asequibles. Claro está, este acceso excepcional implicaría un mayor escrutinio por parte de la Junta Ejecutiva del organismo en el cumplimento de las condiciones cuantitativas y cualitativas que imponga”, se precisó
Además, la consultora aclaró que “los financiamientos precautorios del FMI están diseñados como líneas de disponibilidad, pero no necesariamente como líneas de ejecución (el objetivo es que el país receptor cuente con la opción, más no la obligación, de utilización”. “Sin embargo, los condicionamientos que se imponen son ante la aprobación de la línea, aunque esta no se utilice”, aclaró.
A pesar de estas estimaciones de consultoras privadas, vale señalar que -hasta el momento- el Gobierno nacional no ha informado sobre las condiciones finales del préstamos que se está negociando, así como tampoco se precisaron datos sobre la tasa y el monto del crédito.