La Cámara de Comercio de Córdoba (CCC) se manifestó en apoyo de la medida nacional. No obstante, persisten las observaciones respecto de los altos costos financieros y de la infraestructura necesaria para poder realizar las transacciones
Por Luz Saint-Phat – [email protected]
A partir del pasado día 1 del corriente mes, rige en todo el país la obligatoriedad para que comerciantes, prestadores de servicios y profesionales adhieran a la aceptación de pagos con tarjetas de débito, tal como lo estableció la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), entidad que -además- fijó multas para quienes no cumplan. En este marco, en representación de uno de los sectores incluidos en la disposición, la Cámara de Comercio de Córdoba (CCC) se manifestó en apoyo de la normativa; aunque efectuó observaciones sobre los costos financieros y la escasa conectividad que, muchas veces, impide la realización de las operaciones.
En principio, la iniciativa de la AFIP busca promover la implementación de equipos de puntos venta (POS) en los comercios de todo el país, para que los consumidores tengan la opción de utilizar la tarjeta de débito como medio de pago, en el marco del cumplimiento de la ley 27253.
Según se estipuló, el cronograma de obligatoriedad comenzó en abril de 2017 y finalizó con los monotributistas de las categorías más bajas el pasado 31 de marzo.
En tanto, quienes incumplan esta normativa pueden recibir multas de entre $300 y $30.000, y clausuras de entre tres y 10 días.
“Para nosotros es muy bueno el hecho de que todo se empiece a trabajar de manera blanqueada. Es lo mejor que puede pasar a los comercios que hacen las cosas bien. En ese sentido, la cámara está apoyando firmemente la normativa de implementación del sistema. En realidad, hoy la gran mayoría de los locales que están inscriptos ya tienen esta posibilidad. Lo que están quedando por fuera son los comercios más pequeños a los que, por una cuestión de costos se les hace muy difícil”, explicó a Comercio y Justicia Cristian Pastore, director General de la CCC.
“Tenés una retención de 1,1% en lo que es el débito. También tenés que tener la cuenta bancaria que es donde te depositan. Además, en relación al tiempo que te lo pagan, tenés un gasto financiero. Vos no contás con esa plata antes de 48 horas o 72 horas, en el mejor de los casos. Al no tener el efectivo, al comercio que tiene un producto que tiene una rentabilidad de tres o cuatro por ciento perdió dos ó 2,5% en la transacción y no termina quedando mucho margen”, graficó el ejecutivo.
“Los comercios donde pasa esto son los comercios que tienen baja rentabilidad. Por ejemplo, los quioscos o las despensas que tienen una rentabilidad acotada por los tipos de productos que venden”, agregó.
“El tema es que no se está atacando nunca al negocio financiero que está detrás del negocio de los POS. Visa tiene 14 bancos detrás de la estructura, que son los dueños de las tarjetas. Si no atacamos ahí para que no sea un monopolio -tiene 70% del mercado- entonces hacen lo que quieren. En otros países, el débito es transacción directa, vos pagás cien, a mí me depositan cien y la operación es inmediata. Aquí tardan 72 horas”, precisó.
Por otro lado, respecto de la infraestructura necesaria para realizar este tipo de operatorias, Pastore indicó que “en cuestiones de conectividad, en Córdoba tenemos un gran problema. Vos te vas a cualquier lado, buscás señal con el teléfono y no podés tenerla. No podés ni siquiera recibir WhatsApp, imaginate para hacer una transacción con tarjeta de crédito o de débito. El líneas generales, el comerciante no se opone a poner el aparato, se opone a los costos y tampoco quiere renegar”.
“Entonces, creo que antes de obligar a la gente a poner sistemas, tenés que asegurarte de que funcione. Ahí es donde creo que hacemos agua. También está la cuestión de la disponibilidad de los aparatos”, indicó.
Aún así, Pastore señaló que hoy “hay 42 millones de tarjetas (tanto de débito como de crédito) dando vueltas por el país y, si no nos adaptamos a este sistema, perdemos. El 70% de las transacciones en el comercio se hacen con plásticos”.
Comercio informal
Refiriéndose al comercio informal, Cristian Pastore indicó que es importante que “no sean sólo los comercios registrados los que se inspeccionen” porque “sino vamos a terminar cazando en el zoológico nuevamente”.
“Si se controlan sólo los negocios que están inscriptos, van a quedar (por fuera del sistema) los comercios ‘garaje’ que funcionan en cualquier barrio sin ningún tipo de habilitación, y de los que nadie dice nada porque no se controlan. Otro caso son las ferias a cielo abierto, que tampoco nadie las controla”.La actividad comercial de córdoba cayó 1,5% en marzo
Las ventas en los comercios minoristas de la ciudad de Córdoba registraron una caída interanual en marzo, aunque la actividad mostró un incremento respecto a febrero, según un informe de la Cámara de Comercio local (CCC).
A escala interanual, la evolución neta de la actividad fue negativa, con una retracción de 1,5%o medida en volúmenes, con más de 45% de los comercios que informaron una disminución en la venta de unidades para este período.
En tanto, con relación a la facturación, se registró un crecimiento de 13,1% entre marzo del año pasado y el mismo mes de 2018.
Específicamente, los comercios vinculados con las Pascuas (pescaderías, santerías y bombonerías) lograron un crecimiento interanual de 1,2%, que no alcanzó para revertir la caída general.
Por otro lado, las ventas en comercios de Córdoba tuvieron un incremento de 8,5 por ciento en unidades de venta respecto a febrero. De acuerdo con el comunicado emitido por la entidad ayer, siete de cada 10 comercios reconocieron haber aumentado o mantenido su volumen de ventas (en unidades) durante marzo de este año respecto al mes anterior, como también a nivel facturación el mes presentó un resultado positivo con un incremento de 11,7% en la comparación interanual.
En el tercer mes del año, más de 60 por ciento de las compras se efectivizó a través de medios electrónicos (débito y crédito) y el ticket promedio fue de 980 pesos.