Por Rodolfo Furfaro (*)
Wall Street continúa rompiendo récords. Ni las tensiones geopolíticas con Norcorea ni la expectativa de suba de tasas de la fed en diciembre, ni las tensiones políticas en Europa asustan al mercado.
El llamado índice de pánico “VIX”, que mide la volatilidad del mercado americano, sigue operando en mínimos, demostrando tranquilidad y optimismo al momento que comienza la temporada de balances. Y las expectativas son buenas: se esperan resultados del trimestre y proyecciones de ganancias para los próximos tres meses que convaliden las valuaciones actuales e incluso habiliten una nueva escalada de precios.
Hasta el momento, la mayoría de las empresas que divulgaron resultados ha superado las proyecciones tanto de ingresos y como de ganancias. Entre ellas destacan firmas como JP Morgan y Citigroup, que mostraron resultados superiores a los pronosticados por analistas.
En concordancia, los mercados latinoamericanos también tuvieron en la semana un rendimiento positivo, con el Bovespa volviendo a niveles cercanos a los máximos históricos, sustentados en noticias de una incipiente recuperación económica de Brasil.
En Argentina brilló el mercado accionario, con el Índice Merval marcando récord tras récord y cerrando la semana con una suba de 1,4 %.
Los comentarios de la Agencia Moody’s sobre las perspectivas positivas de Argentina y la probabilidad de una mejora de la calificación de riesgo de los títulos soberanos en los próximos meses tonificó un mercado que ya comenzaba a mostrar signos de desaceleración. Este comportamiento se verificó especialmente en el desempeño de los instrumentos de renta fija denominados en moneda extranjera, que cerraron la semana con alzas en algunos casos de 1,3%.
De cara a la semana entrante se producirán dos eventos a los cuales el mercado les prestará suma atención. En primer lugar, el martes el BancoCentral de la República Argentina (BCRA) enfrenta otra megalicitación de Lebac. Dado que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundió datos de la inflación de septiembre muy fuera de la meta (1,9% nacional), es poco probable que veamos una baja en las tasas en el corto plazo. Este comportamiento, juntamente con un tipo de cambio que está mostrando baja volatilidad, habilita cierto consenso de mercado respecto de la continuidad del carry trade. Este posicionamiento en pesos de grandes inversores se complementa con un alargamiento de plazos para fijar tasas más elevadas.
En segundo lugar, el 22 próximo serán las elecciones legislativas, evento sin dudas importante para los operadores. Si bien las encuestas reflejan resultados positivos para el oficialismo, las expectativas se centran en aspectos tales como las potenciales reformas impositiva y laboral, o el impacto fiscal y en el consumo de los aumentos de tarifas. Por este motivo, y por natural rebalanceo de cartera ante un hecho tan importante y que cierra un ciclo, esperamos algo más de volatilidad, tanto en los mercados de renta fija y variable como también en el mercado de divisas. De ocurrir un resultado positivo para el oficialismo, ingresarán en el mediano plazo nuevos flujos de capitales provenientes del exterior, lo cual le daría un empuje adicional a los mercados de capitales argentinos -no sin antes superar alguna inestabilidad-.
En conclusión, las tendencias del mercado tanto doméstico como internacional reflejan un optimismo moderado de mediano plazo; no obstante existen algunas probabilidades de correcciones de corto plazo, necesarias para darle nuevo aire a la tendencia subyacente. En concordancia con esta visión, las carteras de inversores con perfil conservador deberían incluir una proporción mayoritaria de títulos públicos argentinos emitidos en dólares ubicados en los tramos medio y medio-largo de la curva de rendimientos (DICA, AA26), complementado con bonos corporativos también emitidos en dólares de muy buena calidad crediticia.
Asimismo, existe valor en alocar una porción de la posición en Lebac, en este caso aplicando un mix de plazos para mejorar rendimiento.
Para los inversores más incisivos, es aconsejable incorporar y/o mantener una participación limitada en acciones argentinas, especialmente relacionadas con la energía (YPF, Pampa) y con la construcción (Cresud, TGLT) para beneficiarse de la tendencia subyacente.
Asesor financiero de SyC Inversiones