La producción nacional de vehículos registró en julio una baja interanual de 13,3%, y las exportaciones cayeron 38,3% debido a los severos inconvenientes que atraviesa la economía brasileña, informó ayer la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa).
Las ventas mayoristas a concecionarios, por su parte, mostraron un retroceso menor, de 2,4% internanual, con 52.678 unidades entregadas.
“Estos resultados reflejan el impacto que genera la contracción de la demanda de los mercados externos, principalmente el desempeño del principal socio comercial de la Argentina”, sostuvo la entidad que nuclea las principales terminales instaladas en el país.
“Desde Adefa se monitorea en forma permanente la dinámica de la situación en Brasil. Sin dudas, este comportamiento continúa posicionándose como el principal desafío en materia de comercio exterior, el cual, de revertirse, contribuirá decididamente a traccionar la producción y exportación desde Argentina”, dijo Enrique Alemañy, presidente de Adefa.
El directivo destacó la necesidad de avanzar en la apertura de nuevos mercados de la región, como Colombia y Paraguay -entre otros-, para que la industria local pueda mejorar sus producción y exportación.
Para Alemañy, el sector automotor -como uno de los principales pilares de la economía nacional- promueve y se compromete a continuar trabajando con el Gobierno y el resto de los eslabones de la cadena en la mejora de temas estructurales que habiliten su recuperación, mejoren su competitividad y aumenten las exportaciones y la demanda doméstica de manera sustentables en el mediano y largo plazos.