Las ventas minoristas concretadas por los negocios en marzo por medio de este plástico registraron un incremento promedio de 38% interanual. Computación, viajes y ropa de blanco registraron los mejores desempeños. Zapaterías, tejidos y decoración, en el extremo opuesto.
La facturación que los comercios minoristas concretaron y que fue abonada mediante Tarjeta Naranja registró durante marzo pasado un alza promedio en línea o apenas superior a la inflación anual (calculada por las consultoras privadas) en la comparación interanual, de acuerdo con los datos publicados por aquella compañía.
El alza promedio de las ventas (medida en pesos) fue de 38% interanual, “con lo cual se presume un movimiento que se ubicó por encima del cambio de los precios en los últimos 12 meses”, de acuerdo con lo que informó la empresa.
La “línea divisoria” no es absoluta ya que, según el indicador que se considere, la inflación del año pasado fue de entre 24% y 29%. De todos ellos, el más pesimista (y por ello tomado como “techo”) es el informe que difunden los diputados de la oposición en el Congreso de la Nación, que promedia las cifras de las consultoras privadas, que acusó una suba de 29,81% durante los últimos 12 meses.
Rubros, con diverso desempeño
Más allá de este debate, en el reporte difundido ayer sobre el desempeño de las ventas efectuadas con tarjeta Naranja en marzo pasado se observa que hay rubros de la actividad comercial que no están registrando movimientos.
Es el caso de las ventas de insumos para decoración, la actividad de lavaderos y tintorerías, de zapaterías, de lanas y tejidos y de las florerías, que mostraron desempeños en su facturación de -1; 3; 8; 9 y 11% internanual, respectivamente. Esto evidencia claramente desempeños negativos en volúmenes, al registrar bajas o subas muy por debajo de la inflación real.
En el otro extremo se ubican rubros como insumos de computación, artículos de electrónica, gimnasios, agencias de viajes y ropa de blanco, que mostraron crecimientos en su facuración de marzo de 68; 73; 81; 96 y 112% interanual, respectivamente.
En tanto, vale destacar que el rubro de súper e hipermercados evidenció un crecimiento en su facturación -a partir de operaciones con tarjeta Naranja- de 28% entre marzo de 2014 y el tercer mes de este año, con lo cual se puede presuponer que las operaciones apenas logran sostenerse.
Mostrando la estacionalidad
Cambio de tendencia en el consumo
El interés por rubros de ocio y descanso fueron reemplazados en el comienzo de año por necesidades sustantivas que marcan la preocupación del momento, evidenciado a su vez la estacionalidad que tienen las ventas minoristas. Es decir -según los consumos concretados con tarjeta Naranja-, “los rubros como gimnasios, agencias de viaje, transporte de pasajeros, restoranes, fueron reemplazados por otros como colegios y universidades, librerías, uniformes, e indumentaria deportiva”, se informó.
“En este sentido, se marca el cambio en la agenda de la sociedad a tal punto que la actividad de los colegios y universidades subió 174% en marzo respecto de febrero. También librerías (79%), uniformes (49%), indumentaria deportiva (38%) y zapatillerías (33%) tuvieron un fuerte crecimiento respecto del mes anterior”, se agregó.
Como contrapartida, gimnasios, agencias de viajes y transporte de pasajeros sufrieron una fuerte desaceleración, con cifras que oscilan entre 40% y 48% de incremento en la facturación respecto del mes anterior, “aunque mantuvieron buen desempeño respecto del mismo mes de 2014”.