ESCUCHAREs porque la suba promedio del precio fue de 45,5% mientras que el incremento de los costos se ubicó en torno a 22%, ya que dos de los principales insumos -maíz y soja- mostraron bajas en sus valores internacionales. Además, aseguró que el negocio da ganancias desde hace aproximadamente ocho años.
“El que apostó al cerdo, ganó”, fue la contundente frase de Juan Luis Uccelli, presidente de la Asociación Argentina de Productores Porcinos (AAPP) para graficar el balance del año 2014 para la actividad a nivel nacional. En diálogo con Comercio y Justicia, Uccelli dio detalles.
-En un año que no ha sido bueno para la mayoría de las actividades económicas, usted afirma que la producción de carne de cerdo dejó muy buena rentabilidad, ¿Es tan así?
-Cuando uno analiza que el precio promedio del cerdo en pie en el año 2014 subió en el orden de 45,5% -con precios máximos de 46,3%- siendo los valores más altos en todas las variables de la cadena de valor porcina, incluso superando el aumento del dólar y de la inflación, tanto oficial como no oficial, y se observa que los costos se incrementaron en torno a 22%, se observa a las claras que la de 2014 fue una de las mejores rentabilidades de los últimos años. Incluso hay que tener en cuenta que los precios tanto de la soja como del maíz, dos de los principales insumos de la producción de carne de cerdo, han tenido bajas en sus precios internacionales.
-La mejor rentabilidad… ¿desde hace cuántos años?
-La producción de carne de cerdo es rentable desde el año 2006 más o menos. Ha sido positiva incluso en todos estos años en que la situación agropecuaria general no ha sido buena. Sin embargo, en ese contexto, la producción porcina está creciendo.
-¿El crecimiento ha sido en volumen o en cantidad de productores?
-En ambos. Sucede que la producción de cerdo se ha convertido en una alternativa para muchos productores agrícolas que vieron la posibilidad de diversificar su producción para mejorar sus márgenes. De hecho, la mayoría de los que ingresaron al negocio del cerdo en estos últimos años son en su origen productores agrícolas.
-¿Se sabe más o menos qué cantidad de productores porcinos hay en Argentina?
-Se estima que, entre medianos y grandes productores hay cerca de 2.000. De los pequeños, es más difícil poder obtener el número exacto.
-¿Qué se considera un productor mediano o grande?
-A aquellos que tienen 50 madres o más en producción.
-El crecimiento del sector también se debe al incremento del consumo de carne de cerdo, ¿verdad?
-Evidentemente. El cambio en realidad viene de la mano de la estrategia que asumimos para despegarnos de la idea que existía de que la carne de cerdo es más grasosa y menos beneficiosa que la carne de vaca. Cuando logramos cambiar esa idea, empezó a notarse el cambio. Los números muestran que, de los 14 kilos promedio por habitante que se consumieron en 2014, tres kilos fueron de chacinados y los restantes 11 fueron de cortes frescos. Ese guarismo en 2004, es decir, hace 10 años era: de los cinco o seis kilos que cada habitante consumía en promedio por año, más o menos tres eran de chacinados (es decir, igual que ahora) y dos o tres de carne fresca. Además, la carne de cerdo no sólo que no es más grasosa que la de vaca, sino que es más beneficiosa, ya que mejora la actividad sexual de la gente.
-Pensé que eso era un mito…
-No, claro que no. Lo he comprobado. ¡Tengo seis hijos! (risas). Además, hay que recordar que la carne de cerdo es más barata. Entonces, cuando la señora va a la carnicería, no sólo elige la carne de cerdo porque es mejor, sino porque es más barata que la de vaca.
