Tras lograr el apoyo de varios senadores no incluidos dentro del Frente para la Victoria (FPV), finalmente el oficialismo pudo ayer, en sesión especial de Senadores, aprobar el proyecto que adelantó las elecciones legislativas al 28 de junio. La votación arrojó 42 votos a favor y 25 en contra de la iniciativa, en tanto cinco legisladores estuvieron ausentes.
Además de los senadores oficialistas, la propuesta contó con el apoyo de dos representantes del ARI de Tierra del Fuego (que renunciaron a esa fuerza), José Martínez y María Rosa Díaz, y el neuquino Horacio Lores.
Por su parte, la oposición logró reunir 25 votos. Entre quienes desaprobaron el proyecto oficialista estuvieron la UCR, la Coalición Cívica, el socialismo, los partidos provinciales, el peronismo disidente y algunos monobloques.
El proyecto ya tenía media sanción de Diputados y restaba la aprobación de la Cámara alta. Por tratarse de una reforma del régimen electoral, la Constitución exigía una mayoría absoluta de 37 votos afirmativos en el Senado (mitad más uno del total de sus 72 miembros). Según la norma vigente, las elecciones deben realizarse el cuarto domingo de octubre, pero la iniciativa aprobada ayer dispuso una excepción “por única vez” a esa regla.
Entre los senadores que defendieron el adelantamiento de los comicios estuvieron el santacruceño Nicolás Fernández y el cordobés Roberto Urquía. El primero indicó que “nadie puede negar que hay una situación de emergencia a la que hay que abocarse”. Por su parte, Urquía exhortó “al gobierno, a la sociedad y a los partidos políticos” a conformar “una mesa nacional de diálogo” en forma urgente, “con el propósito de acordar las políticas necesarias para enfrentar esta crisis”.
Los senadores Juan Carlos Romero (del PJ disidente) y Samuel Cabanchik (de la Coalición Cívica) fueron algunos de los que se opusieron al proyecto oficial. Romero esgrimió que la iniciativa “altera el cronograma e impide a las provincias participar de internas”, en tanto que Cabanchik indicó que “el adelantamiento de las elecciones es parte del problema, no de la solución. Estamos de acuerdo que lo primero es resolver la crisis, pero entonces hagamos ese acuerdo nacional y es el Poder Ejecutivo el que debe convocarlo”.
Ahora el Gobierno tendrá que correr contra el tiempo, ya que se debe convocar a las elecciones con 90 días de antelación y la campaña electoral deberá comenzar el 29 de abril próximo. Así iniciará la carrera para renovar 127 bancas de diputados y 24 bancas de senadores.