Consideran justificado el despido de una vendedora

Según las constancias analizadas en la causa, la accionante incurrió en una falta que ameritaba la pérdida de confianza que invocó su empleadora para legitimar el distracto. [privado] Al acreditarse que una vendedora de CMR Falabella SA salió de las oficinas donde prestaba tareas y se dirigió al piso del local comercial, durante su horario de trabajo y vistiendo el uniforme de la empresa, con cartera e ingresó al sector de caja y escaneó el precio de las prendas que fue tomando, todo lo cual esta prohibido por el reglamento interno de la empresa, la Sala 7ª de la Cámara del Trabajo de Córdoba confirmó el despido por pérdida de confianza de la actora y rechazó en consecuencia las indemnizaciones que peticionaba. Marisa Isabel Gilli denunció que no existió un despido con “justa causa”, ya que no concurrió la falta grave que la demandada le endilgó. La accionada ratificó su posición en cuanto a la actitud de la empleada, ratificando la existencia de la injuria. Prueba A su turno, el tribunal integrado por Arturo Bornancini -autor del voto-, José Luis Emilio Rugani y Graciela María del Valle Galoppo, luego de analizar la prueba testimonial rendida señaló que “la conducta asumida por la actora, constituye una flagrante violación al reglamento interno de la demandada, extremo éste que también fue reconocido por la testigo por ella propuesta, pues nada la autorizaba a ingresar a los sectores internos de la caja de la tienda de Falabella SA, y menos aún con cartera y con el uniforme provisto por la empleadora, sin contar para ello con autorización de ninguna clase, todo lo cual implica un actuar que no se condice con el principio de la buena fe”. En ese orden de ideas, el fallo subrayó que “no existe, conforme a las máximas de la experiencia, justificación alguna para ingresar a un sector vedado para ella, como lo es el de las cajas de esa tienda, y menos aún para escanear productos, pues todo ello solo puede tener como contrapartida que esa conducta era con otros fines, es decir aprovecharse de su situación de dependiente para otros propósitos que no se condicen con un correcto actuar, y que por lógica consecuencia es determinante de que se pierda la confianza en ella depositada”. Finalmente, la Sala consideró que “ese hecho objetivo, debidamente acreditado, configuró indudablemente la pérdida de confianza en la actora que impedía la normal prosecución de la relación labora”, por lo cual rechazó la demanda en cuanto pretendía el pago de la integración del mes de despido; indemnizaciones por antigüedad, sustitutiva por omisión de preaviso y la prevista por el artículo 2 de la ley 25323. Autos: “GILLI MARISA ISABEL c/ CMR FALABELLA SA - ORDINARIO - DESPIDO – EXPTE. Nº 175776/37”

[/privado]

Consideran justificado el despido de una vendedora

Le amputaron una pierna como consecuencia de caer al pozo de una obra de gas

Desestiman planteo de prescripción en un juicio tributario

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Opinión

Columna de JusCom

España: la jornada y el Tercio de Flandes

El Árbol del Odio ensancha el horizonte de la guerra

Leé también

Marzo cerró con 11.424 personas detenidas: la población del SPF subió 1% desde enero

Confirman rechazo a planteo de docente para recibir una compensación económica

Prohibición de indexar que imponía la Ley de Convertibilidad de 1991 es inconstitucional

Definen vínculo laboral de tambera en una explotación rural

Más populares

Newsletter

Gestión

Canales

Publicaciones

¡Bienvenid@ de nuevo!

Recuperar contraseña

Tabla de contenidos

Are you sure want to unlock this post?

Are you sure want to cancel subscription?