ESCUCHARUn relevamiento realizado por el IIE de la Bolsa de Comercio reveló que bajó 33% la cantidad de ferias internadas en la ciudad y casi 21% el número de stands ubicados en ellas, sin embargo se incrementaron las existentes en plazas, parques y hasta en la calle.
Por Cecilia Pozzobon – [email protected]
El fenómeno de la venta informal en la ciudad de Córdoba, lejos de desaparecer, va cambiando de forma y lugar de acuerdo con la necesidad de subsistencia de los comerciantes que lo ejercen.
En efecto, luego de la persecución que inició la intendencia de Ramón Mestre a comienzos de sus gestión, los vendedores ambulantes, manteros y puesteros fueron integrándose a ferias de internada (espacios de uso colectivo, cerrados y subdivididos en unidades de comercialización), pero el avance de los controles y las inspecciones llevaron a algunos pocos a iniciar las instancias de regularización, mientras otros muchos se disuadieron y optaron por cambiar el lugar.
Un relevamiento efectuado por el Instituto de Investigaciones Económicas (IIE) de la Bolsa de Comercio de Córdoba a pedido de la Cámara de Comercio de Córdoba (CCC), determinó la existencia de 1.528 puestos de venta informal entre los localizados en ferias de internada, ferias a cielo abierto y ubicaciones de manteros y carros.
“En términos generales se puede decir que la cantidad de asentamientos en el microcentro ha bajado respecto de mediciones anteriores, pero hay que destacar que se han incrementado mucho más los existentes en la periferia de la ciudad”, explicó a Comercio y Justicia Ramiro Sosa Navarro, economista del Instituto de la Bolsa.
“A medida que se tiende a la regularización en las ferias de internada, los comerciantes terminan disuadiéndose y migran hacia las consideradas a cielo abierto ubicadas más en la periferia de la ciudad”, agregó.
De acuerdo con los datos difundidos ayer y en comparación con el anterior relevamiento encargado por la Cámara de Comercio que data de diciembre de 2012, la cantidad de ferias ubicadas en la ciudad cayó 33,3% al pasar de las 27 descubiertas hace poco más de dos años, a las 18 de la actualidad.
Además, hay que tener en cuenta el cambio de formato/espacio, ya que mientras la gran mayoría de las 27 de aquel entonces eran ferias de internada, en esta oportunidad, suman seis las clasificadas como a cielo abierto.
“Se debe tener en cuenta que en esta oportunidad se agrandó la muestra, ya que se relevó el denominado Paseo de las Pulgas” y se incluyó el parque Las Heras que, en 2012 “no existía como espacio en el que se visualizaba el fenómenos de la venta ilegal”, explicó Leonardo Faner, economista integrante del Instituto de Investigaciones.
“Lo que se puede comparar entre ambos relevamientos son 10 ferias de internadas. A partir de allí, se puede determinar esto de que se ve menor cantidad de puestos en el centro de la ciudad, y más localizados en la periferia”, dijo Faner al explicar que “no sólo se ha reducido la cantidad de puestos de la feria, sino que es menor la cantidad de ferias que se sostienen dentro del microcentro”.
Menos puestos “adentro” y data fiscal
Asimismo, vale destacar que en las ferias que se encontraron a fines de 2012, se relevaron 17 y en ellas se contabilizaron 412 puestos.
En esta oportunidad, sólo se localizaron 18 ferias (12 internadas y seis a cielo abierto) de las cuales todas fueron relevadas. Se contabilizaron 1.220 puestos (326 en ferias internadas y 894 en ferias a cielo abierto).
El otro dato llamativo es el que detalla que uno de cada cuatro comerciantes de los 326 relevados en las ferias de internada exhibía el certificado Data Fiscal de la AFIP.
El dato implica que uno de cada cuatro vendedores está, al menos, inscripto en el régimen simplificado del monotributo. Sin embargo, no cumplimentan con la inscripción de Comercio e Industria municipal, ni con el Sifcos provincial.
Asimismo, la totalidad de las ferias de internada relevadas cumplimentaban con las correspondientes señalizaciones de salidas de emergencia y contaban, entra las medidas de seguridad exigidas por el municipio, con extintores de incendios.
Ambulantes
El trabajo incluyó también el relevamiento de los vendedores ambulantes ubicados en el microcentro de la ciudad. Para ello se efectuaron observaciones durante tres días en los que se descubrieron 308 vendedores (entre manteros, vendedores y carros). “En la calle San Martín (entre Colón y Humberto Primo), se detectaron 71 puestos de diversa índole. En su mayoría en el rubro Indumentaria, Juguetería y esparcimiento”, se indicó.
Ahora Rentas controlará las “saladitas”
Los puesteros deberán pagar 150 pesos por mes
– El relevamiento detalló que la mayoría de los puesteros informales comercializa indumentaria. Entre los puestos ubicados dentro de las ferias de internada, 90% ofrece productos de este rubro.
– En el caso de las ferias a cielo abierto, también se encontraron puestos de venta de pirotecnia; ropa y juguetes; paseos en pony; comida y CD/DVD; ropa usada; repuestos usados, herramientas usadas, cocinas y garrafas usadas; bicicletas usadas; cañas de pescar usadas; mascotas; plantas; caballetes, rejas, muebles de madera usados, palas, colchones, asadores y lámparas; entre otros. La heterogeneidad es bastante más grandes que en el caso de las ferias internadas.
